CANIRAC ha buscado apoyar a sus agremiados, estableció contacto CFE

MÉRIDA, Yuc., 16 de mayo de 2020.- Roberto G. Cantón Barros, presidente de la CANIRAC, Yucatán, indicó que desde finales del mes de marzo se estableció comunicación con la CFE Suministro de Servicios Básicos Peninsulares mediante una carta enviada a José Antonio Aguirre Leyva para que se le pudiera brindar apoyo y asesoría a todos los agremiados que tuvieran conflicto con sus recibos de luz.

Por lo que invitó a todos los restauranteros a que se acerquen a la cámara a fin de recibir apoyos respecto al incremento en el cobro de su energía eléctrica.

“Sabemos que las tarifas eléctricas en el sureste mexicano son las más altas del país y han sido un tema sensible en los últimos años.  Por esta razón y cualquier otra adversidad que se presente en nuestro sector, la Cámara de Restaurantes está para apoyar a la industria que, en estos tiempos de crisis, está más fuerte y unida.”

Cantón Barros aseguró que hasta ahora se han atendido a todos los restauranteros que se han acercado por este tema, por lo que invitó al resto a ponerse en contacto mediante el correo [email protected] para poder tratar su tema.

Hasta la fecha se estima que más de 100 restaurantes han tenido que cerrar sus puertas debido a la emergencia sanitaria por el Covid 19, al menos el 15 por ciento de estos no volverá a abrir sus puertas pues no cuenta con la liquidez suficiente para volver a la normalidad.

En el caso de las tarifas eléctricas, al menos dos restauranteros han mostrado su inconformidad, pues pese a que cerraron sus instalaciones desde el pasado mes de abril, la CFE ha enviado sus recibos con cantidades de entre 9 mil y 48 mil pesos.

Uno de esos casos es el de Maira González, dueña de “La Mercadería”, lugar que desde el pasado 1 de abril decidió cerrar sus puertas, desconectando pantallas, refrigeradores y todo aquello que representara fuga de energía, sin embargo, poco sirvió pues su recibo pasó de 22 mil a 48 mil pesos.

Vía redes sociales publicó el recibo que le llegó y pidió el apoyo de las autoridades, pues de su restaurante dependen cerca de 50 familias, que verían afectados seriamente sus ingresos si por cobros como este el lugar se ve obligado a cerrar de manera definitiva.

Esta no sería la primera ocasión en que el sector restaurantero se pronuncia contra las altas tarifas de la CFE, pues en el 2018 implementaron una campaña para solicitar a la paraestatal detuviera “los abusos” en el cobro de energía.