Teléfono Rojo
Layda Sansores San Román le propuso a sus ex compañeros de Convergencia: necesitamos que uds. nos ayuden a fundar Morena, le dijo. Para ello requerimos que los vehículos y las prerrogativas que tienen en Campeche los cedan al movimiento, les pidió. Los autos y demás los vamos a necesitar para ayudar a Andrés Manuel.
Palabras más, palabras menos, Layda les proponía a los entonces convergentes cometer un fraude electoral: desviar recursos de un partido para beneficio de otro.
La negativa de muchos de los miembros de Convergencia llevó a Layda a no insistir aunque ellos ocupaban un predio propiedad de los Sansores en el Paseo de los Héroes.
Layda se unió a Convergencia desde el 2001 y salió de ese partido en 2014 para unirse a Morena en ese mismo año y en 2015 competir, de nuevo, a la gubernatura, esta vez por Morena, misma que perdió ante Alejandro Moreno.
Dante Delgado no movió un dedo porque era aliado de López Obrador: lo fue en 2012 para la elección presidencial, y Layda llegó al Senado, y en 2018 le apostó a Ricardo Anaya en la presidencial. Sin embargo, en 2003 Layda fue candidata de Convergencia a gobernadora de Campeche, y ocupó un escaño en el Senado por ese mismo partido en 2006.
Los vínculos de Sansores con Dante no sabemos cómo terminaron, pero sabemos que la reticencia de aliarse con el frente amplio por México tiene, eso dicen ellos, que ver con la falta de acuerdos en el Congreso de Nuevo León donde PRI y PAN tienen 14 diputados locales cada uno y MC sólo 11 legisladores, pero el gobernador Samuel García no ha logrado acuerdos con ellos y se queja de todas sus propuestas se enfrentan a la negativa del PRI y del PAN con quien se niega a tener acuerdos.
Dante asegura que está lejos del PRI y que con el PAN no iría en la elección presidencial, tratando de sostener su postura de que solos le resulta mejor a su partido ir a la elección de 2024, aunque no haya presentado candidatos a las gubernaturas de Coahuila y el Estado de México.
En Campeche el triunfo de Movimiento Ciudadano fue absoluto sin necesitar de ir con aliados y ganó la alcaldía local y perdió la gubernatura por un diferencia que no llegó a dos puntos porcentuales.
El recuento viene al caso por la embestida desde el gobierno del Estado en contra de Eliseo Fernández Montufar, prófugo del estado hasta hoy, y a quien, sin pruebas, el gobierno de Sansores pretende convertir en el asesino serial que estaría detrás de dos homicidios y un atentando en los que resultaron víctimas cercanos colaboradores del ex candidato a gobernador.
La intención del gobierno local es incapacitar legalmente a Fernández para competir por cualquier cargo, considerando que podría ser el candidato al Senado por MC en la elección de 2024.
Sin embargo, Layda anunció en su delirante video, en el que lo acusa de ser asesino, que va contra el proyecto del ex alcalde y por ende sólo hizo visible lo que ya se había visto: copto a los diputados del Congreso local y emprendió una embestida contra la alcaldesa Bibe Rabelo de la Torre.
Los desencuentros de los emecistas también dieron pie a la salida de Jamile Moguel, una pieza fundamental en ese partido para los triunfos logrados en los comicios de 2021 y “aceitados” con recursos públicos lograron que los legisladores y la ex dirigente se pasaran a Morena.
Es la vieja escuela, pero operada de la peor manera.
Los expedientes contra Eliseo se irán almacenando y al tener a la fiscalía como su aliada, Sansores no reparará en abrir los expedientes que necesite si con ello se quita de enfrente al sujeto que estuvo a punto de no dejarla cumplir su aspiración de ser gobernadora, es un decir.
En estas semanas, lo que vimos empieza a organizarse es la agresión contra Rabelo de la Torre por lo que los expedientes contra la alcaldesa empezarán a apilarse precisamente en los días en que la Comuna presume su primer lugar nacional en temas de transparencia y que la Cotaipec local no sólo desestima sino contradice en rueda de prensa.
En su intención de anularla, los expedientes de la alcaldesa empezarán a apilarse tratando de dar paso a un juicio de procedencia para destituirla y evitar que de nuevo se postule para su reelección.
Ocupado como anda en el desvanecimiento de sus argumentos de que MC es la segunda fuerza política del país, Dante Delgado pareciera no considerar la posición de Campeche como una fortaleza para su partido, quizá por el significado que electoralmente tiene la entidad a diferencia de Jalisco que concentra casi 6 millones de electores; Nuevo León tiene casi 4.5 millones de electores; Estado de México con más de 11.6 millones; la Ciudad de México que casi llega a 8 millones; Veracruz con 5.6 millones y Puebla que tiene casi 4.5 millones de votantes.
Campeche a julio pasado tenía casi 680 mil electores por lo que su peso electoral es mínimo.
Las embestida de Sansores contra Movimiento Ciudadano no ha valido un comentario de su dirigencia nacional a pesar de que Dante Delgado no ceja en su censura contra PAN y PRI, pero no hace alusión a Morena, ni al presidente ni a la gobernadora local, a pesar de que la conoce muy bien.
La alcaldesa de Campeche necesita hoy de todo el apoyo que le pueda dar su partido, de toda la visibilidad que sea posible porque en la medida que se haga visible podrá defenderse del ataque de un gobierno que está judicializando la política y usando su fuerza policiaca y el control judicial para aniquilar a sus adversarios en el entendido de que ni los reveses judiciales federales le merecen atención.
Ante un gobierno atrabiliario es necesario sacar de lo local el conflicto y redimensionarlo para generar apoyos fuera de la entidad por el abuso de poder y exceso que se está cometiendo contra una autoridad.
Eliseo Fernández Montufar es una figura relevante hoy en Campeche precisamente por el golpeteo del gobierno pero no hay certeza de que pueda ser un jugador electoral en el proceso de 2024, en cambio Biby Rabelo es la alcaldesa en funciones, tiene fuero constitucional, un cabildo y un partido que debería estar activándose para su defensa formal.
En los comicios de 2024 se define quienes pueden ser candidatos a gobernador para el relevo de Sansores. En una entidad dividida y polarizada, quienes logren destacar hoy pueden subirse a la elección de 2024 y en eso está el PRI, el PAN y en especial Morena que, además del dinero, nada los detendrá para mantener el poder más que el voto masivo de la sociedad.
Es tiempo de encontrar aliados, de sumar y de generar estrategias de defensa y contención. Quedarse callados y meterse bajo la mesa no es buena idea sobre todo viendo que la elección presidencial evitará el foco a lo local a menos que haya razones de peso para jalar el reflector y eso se construye no es por generación espontánea.
Dante hoy no es aliado ni de sus gobernadores, menos de sus alcaldes y diputados locales. La decisión de MC tiene que ver en lo local, o se consolida lo que ya tiene o se quedará como un esquirol político.
En Campeche y en el atropello contra dos de sus éxitos más sonados, ¿dónde está Dante?