Indicador Político
AMLO con Trump: una apuesta al ganar-ganar
Una pregunta central sobre la inminente visita de Andrés Manuel López Obrador a Estados Unidos:
¿Qué pierde el presidente de México visitando a Donald Trump en la Casa Blanca?
Pues a menos que esté entre los planes del primer mandatario el vender a los vecinos del norte los estados de Baja California o Tamaulipas, la mencionada visita, muy comentada como riesgosa y hasta peligrosa para el tabasqueño, tendrá, sin duda alguna, más ventajas políticas que riesgos a la imagen presidencial.
¿Qué gana entonces López Obrador visitando al presidente del país más poderoso de la tierra y con el que tenemos más de tres mil kilómetros de frontera?
Enumero tres ganancias para el político de Macuspana:
1.- La visita es un acto de gobierno que ayudará a que el T-MEC, en lo que a México respecta, se ponga en marcha a la brevedad ante la emergencia económica que ha agravado seriamente la crisis sanitaria del Covid-19.
El tratado es un acuerdo trilateral que no cambiará sustancialmente en el supuesto de que Donald Trump no ganará las elecciones de noviembre próximo.
2.- Contener la migración centroamericana es una medida que en mucho beneficia a nuestro país.
El riesgo que implica tener en la frontera norte campamentos, albergues o refugios a lo largo de la frontera norte es manifiesto en ciudades como Tijuana en Baja California y Matamoros en Tamaulipas, es muy alto ya que en esas ciudades los migrantes se han asentado con visos de permanencia indefinida afectando a los pobladores.
(Ver capítulo sobre las poblaciones de migrantes en Europa en el libro Tiempos Líquidos de Zygmunt Bauman)
3.- Y en el plano político para López Obrador el tener una relación de amigo con Donald Trump le permitirá seguir contando, cuando menos, con la complacencia del mandatario estadounidense para que la difusión del verdadero trasfondo de la tenebrosa operación Rápido y Furioso, ponga a reflexionar seriamente al tuitero hiperactivo en que se ha convertido el ex jefe de Genaro García Luna, Felipe Calderón, quien acaba de ser denunciado por un ameritado divisionario de ser conocedor de las relaciones de su hombre de confianza con las organizaciones criminales que operan en nuestro país.
Rasgarse las vestiduras por una visita, que es una apuesta al ganar-ganar y de la que dentro de una semana ya no será de comentario, es solo un síntoma de patrioterismo ramplón y chabacano.
EN TIEMPO REAL
1.- El General en retiro, Tomás Ángeles Dauahare, alertó personalmente y por escrito al expresidente Felipe Calderón que su entonces Secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, estaba involucrado con el narcotráfico, en especial, con el Cártel de Sinaloa.
Cosa que, por supuesto negó Calderón, pero carece de toda credibilidad, nadie en su sano juicio podría confiar en que siendo presidente no estaba enterado de los nexos de uno de sus más cercanos colaboradores con el narcotráfico. Que no se le olvide que aún siguen vivos los personajes que podrían hablar y hacerlo caer.
2.- Roberto Velasco Álvarez, exvocero de la cancillería mexicana, fue designado como director general para América del Norte, un nombramiento que rebela el grado de confianza que le tiene canciller Marcelo Ebrard, pues además le quitó la carga de ser el presidente de la Junta Directiva de Notimex.
Velasco se ha convertido en uno de los principales operadores del canciller, por ende, es uno de los principales encargados de la logística del viaje del primer mandatario López Obrador a Estados Unidos.
3.- La organización ambientalista Greenpeace México obtuvo por fin la suspensión definitiva contra los Acuerdos emitidos por la Secretaría de Energía (Sener) y el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) que limitarían la participación de las energías renovables privadas en el Sistema Eléctrico Nacional.
El fallo del Poder Judicial determina al final que todas las autoridades competentes acaten la resolución y suspendan cualquier acto que limite las pruebas preoperativas y cualquier otro que impida la operación del sistema eléctrico en la forma en que lo hacía previo a la emisión de los dos Acuerdos.