
Entre Hipona y los Andes
La mejor manera de politizar a la justicia es eligiendo jueces, magistrados y ministros de la Corte. Es convertir la ley en la decisión de la mayoría, independientemente si hay o no razón, se hará “justicia” para esa mayoría o para quienes colaboraron en la campaña o apoyaron la postulación del candidato.
La democracia no es sólo una elección, que si una parte del proceso y la culminación de esa democracia es el voto en el que ahí sí, la mayoría define quienes serán los que administren el gobierno y sus fondos, pero también quienes sean los ejemplos del cumplimiento y respeto de la ley, esa que si debe de funcionar para todos no sólo para mayoría.
Estamos ante la construcción del INE del Bienestar porque la elección de jueces y magistrado no será la elección que “democratice” el poder judicial sino el que justifique la apropiación de ese poder, y su destrucción para que ya no haya un poder independiente y con ello ni elecciones libres y al destruirlo, con ello controlar al cuarto poder, como se definía en México a la prensa libre e independiente.
El fracaso ya anunciado de esa elección sólo servirá como justificación para la creación del INE del Bienestar, regresar las elecciones al gobierno y con el pretexto de la austeridad y la falta de dinero se regresará a empleados del gobierno como validadores que dependen del gobierno para hacer su trabajo: serán, como lo eran, meritorios para ascensos y reconocimiento.
Sheinbaum dijo que con un 5 por ciento la elección será un éxito que justifica una reforma electoral porque se necesita incentivar la participación, algo que no hizo el INE y que se eligieron perfiles incorrectos porque el INE no los quiso bajar y aunque ellos los eligieron para contender no tendrán la culpa de quienes se haya colado ya sean del narco, de la delincuencia, de grupos de poder y políticos además de empresariales.
El proyecto considera también la desaparición de las universidades autónomas para dar paso a las del Bienestar que no tendrán examen de ingreso, ni saldrán reprobados y, como en los años 80´s, los fósiles serán los dirigentes de Morena del futuro. Igual que pasó con la presidenta Claudia y sus seguidores desde los días de la UNAM.
Listas las universidades del bienestar, los abogados y notarios del bienestar también serán regulados y sometidos al empleo del gobierno de la república, porque tendrán la validez del gobierno para ejercer y con ello dejarían de tener independencia a quien se contrata para las escrituras y los certificados de validez además de las sociedades y sus regulaciones.
Sin embargo, hay quienes dicen que hablar de una dictadura es demasiado, pero la reforma electoral y la desaparición del INE Morena se apropia de la vía de acceso al poder y con ello pretenden no dejarlo por sexenios. Si piensan en grande, más de los 80 años del PRI. Ya para entonces no habrá plurinominales porque todos los diputados y senadores serán del movimiento y las minorías no tendrían posibilidades de participar, pero mientras sigan existiendo los candidatos plurinominales éstos se elegirán por una tómbola aunque digan que “¿Cómo creen que vamos a hacer eso? Nooo, no somos así”. Después sólo nos consolará el ahí está, así se va a hacer y te chingas…
Morena hará un gobierno de terror. El miedo como control y si se aliaron con el narco, que les impide recurrir a él para someter opositores, como vimos en el 2021 y la presidencial del 24.
Cuando una democracia muere, siempre hay dos elementos: hay alguien que trabaja para desmantelarla -son los culpables- y el otro factor: siempre hay los que hablan de ello con menosprecio, desinterés o por miedo dejan que los otros hagan lo que ellos planean, hay culpables y responsables.
Desde 2018, López Obrador se ha encargado de lucrar con la desesperanza, la derrota moral…
Sin embargo, no lo olvidemos, la democracia se conquistó, no es una concesión, no podemos cruzarnos de brazos, está pasando en el mundo y hay que apostarle a la resiliencia y a que todos hagamos lo que nos toca.
Los hechos:
Claudia Sheinbaum renunció a ser científica por ser jefa de gobierno: dejó que la contaminación con azufre desde Tula, Hidalgo, inundara la Ciudad de México que ya había contenido la polución cotidiana; renunció a la ley cuando violó la autonomía de Morelos y detuvo hasta en cuatro ocasiones al fiscal, que tenía fuero, y que renunciaron a solicitarlo al Congreso, que no lideraba Morena, y que la Suprema Corte paró con amparos y resoluciones que les decía cómo proceder, aunque no lo acataron.
La justicia no era precisamente su compromiso y Ernestina Godoy, desde la fiscalía capitalina, no sólo inventó delitos para servir a los interés del Fiscal Gertz Manero y mantuvieron en prisión más de 18 meses a la hija de su cuñada a quienes pretendía responsabilizar de la muerte de su hermano, un anciano que acreditó con documentos que siempre estuvo con cuidados médicos de calidad. Gertz no los quería como herederos de su hermano.
Los hechos dicen más que las palabras.
Limitaciones y apetitos
El tren suburbano de Campeche se hizo a pesar del desdén de quien hoy lo promueve y la alcaldía capitalina. En la presentación del proyecto, que se justificaba como transporte de pasajeros del tren maya a la zona hotelera campechana, ni la alcaldesa ni la gobernadora le hicieron el favor al General Águila cuando lo presentó.
Hoy, con el tren casi listo, los hoteles que llevaría para hospedaje ya no operan y los pasajeros del Tren Maya brillan por su ausencia, precisamente por estar fuera de la ciudad, lo que se repite en cada estación alejada de los centros poblacionales.
El fracaso del tren se llevó entre las patas a Campeche que vio que todo el presupuesto federal se dedicó a esa obra que, en realidad, no significa ni un sólo beneficio real a la economía ni al desarrollo de la entidad.
Súmese a ello el deterioro económico de la capital, de la isla principal fuente de ingresos, y de los municipios pues no se esperaban gran cosa. Campeche ha tenido años de decrecimiento desde hace mucho, agravándose desde mediados del sexenio de Peña Nieto y peor en el de López Obrador.
El tema del fraude de Oceanografía que involucró a City Banamex enfrenta una nueva demanda que se reactivó que acusa al banco de causar un daño por mil millones de dólares de la empresa carmelita hoy en bancarrota.
Un panel de tres jueces del Tribunal de Apelaciones del Circuito de Miami dijo que 30 vendedores, acreedores y tenedores de bonos de Oceanografía alegaron que CitiGroup ayudó sustancialmente al fraude y un juez de la corte inferior se equivocó hace 9 años al desestimarla.
La resolución explica que la unidad Banamex de Citigroup había proporcionado anticipos en efectivo a Oceanografía, que proporcionó servicios de perforación a la compañía petrolera estatal de México Petróleos Mexicanos y cobró pagos de intereses sobre los anticipos.
Los demandantes, incluidas las compañías de envío y arrendamiento, los fondos de inversión y Rabobank, con sede en los países bajos, dijeron que CitiGroup adelantó 3.3 mil millones de dólares a Oceanografía entre 2008 y 2014 a pesar de saber que la compañía tenía demasiada deuda y había estado forjando firmas de Pemex en los formularios de autorización.
Mas tarde Citigroup encontró casi 430 millones de dólares de anticipos en efectivo fraudulentos, y fue multado, abre una nueva cuenta de 4,075 millones de dólares por parte de la Comisión de Bolsa y Valores de los EEUU en 2018 sobre los controles internos de Banamex.
El ex director de Citigroup, Michael Corbat, dijo que banco despidió a 12 empleados mientras los reguladores mexicanos dijeron que 10 empleados bancarios eran penalmente responsables.
La decisión de 82 páginas, el juez de circuito Britt Grant encontró suficiente acusaciones de que Citigroup retuvo información clave sobre Oceanografía de los demandantes, y los pagos de intereses proporcionaron un incentivo financiero.