Indicador Político
Pensión Básica empató juego a AMLO, ahora Mario Delgado en apuros de la mano de los Gallardo
La propuesta de ayuda a desempleados le puede tumbar el circo a López Obrador para enjuiciar a ex presidentes. La propuesta de Damián Zepeda es clon de la de Ricardo Anaya, pero no le digan al presidente.
Le empataron el juego en la última entrada a Andrés Manuel López Obrador. En los vestidores el manager-presidente debe estar haciendo un berrinche brutal porque la operación de Ricardo Monreal Ávila no pudo frenar las firmas en el Senado para la consulta de la propuesta panista sobre Ingreso Básico Universal.
Y no tiene comparación un programa de ayuda que pretende llegar hasta a 10 millones de desempleados formales e informales, inclusive personas que vieron disminuido considerablemente su ingreso por la pandemia, con apoyos de un poco más de 3 mil pesos mensuales, comparado con el juicio a ex presidentes que ni Andrés Manuel se la cree, ya que los ha perdonado una y otra vez por anticipado, aunque dice que “el pueblo manda”, a ese que ve cada mañana en su espejo.
La propuesta de consulta encabezada por Damián Zepeda Vidales tiene la virtud del beneficio, mientras que la de López Obrador lleva el veneno del revanchismo que él mismo ha ‘recomendado’ a sus fieles seguidores que no se concrete.
El Salario Básico Universal fue una propuesta de campaña del candidato del PAN-PRD-MC Ricardo Anaya Cortés, curiosamente muy cercano a Zepeda Vidales, pero no le comenten al presidente, porque si se entera que puede ser una curva de su ex contrincante, que además quedó en segundo lugar de la elección presidencial, se va a infartar.
Y como en el ajedrez político no hay nadie tan ching… como suele creerse, pues ahora resulta que el bloqueo desde Palacio Nacional a México Libre para evitar que el INE de Lorenzo Córdova le otorgue el estatus de partido, benefició a Ricardo Anaya, y tooodo por tratar de aniquilar a Felipe Calderón Hinojosa y Margarita Zavala, aunque falta el fallo del Tribunal Electoral.
Pero falta que la propuesta llegue a San Lázaro, ahí está en un apuros Mario Delgado Carrillo si no logra bloquear la consulta, que aquí entre nos, algunos dicen, nomaaás dicen, que Monreal la dejó pasar como zancadilla -¡será capaz!-.
Con esta solicitud de última hora se le cae medio circo al presidente porque los ciudadanos estarían frente a dos consultas, una muuuy benéfica para sus bolsillos, y otra llena de veneno que servirá para un vaudeville mediático de Cuarta, ya que difícilmente se probará algún delito a Carlos Salinas, Ernesto Zedillo, Vicente Fox, Felipe Calderón o a Enrique Peña Nieto.
Así que Mario Delgado, proclive a pactar con el diablo para lograr sus propósitos acumula preocupaciones. Ahora está muy entretenido en su afán por quedarse con la presidencia de Morena, al grado que no le importó cerrar tratos con el impresentable diputado potosino Ricardo Gallardo Cardona.
Circula una fotografía de Delgado y “El Pollo” Gallardo en el restaurante Cielo Tinto de San Luis Potosí que certifica el rumor de que una vez renunciado del PRD, los dos diputados ablandaron voluntades de legisladores del Partido Verde para fortalecer al potosino como líder de la bancada.
¡Qué tanto son 30 millones de pesos..! como reza el dicho, en política lo más barato es el dinero, así que a Mario no le importó la detención de Gallardo Cardona en el 2015 acusado de desviar 200 millones de pesos siendo alcalde de Soledad de Graciano Sánchez, SLP.
Como todo, los acusadores desganados ‘olvidaron’ integrar el delito de peculado y lo acusaron de desvío ¿? por lo tanto, los abogados lograron ‘abrir’ por tecnicismos las puertas del Cefereso de Sonora para mostrarle la salida al ahora diputado federal.
El padre de Gallardo Cardona, Ricardo Gallardo Juárez, también alcalde de Soledad de Graciano del 2009 al 2012 y de San Luis Potosí capital, del 2015 al 2018, tiene investigaciones detenidas en la Fiscalía del estado por peculado.
Así llegaría Mario Delgado a Morena, cobijado por el clan de los Gallardo, perfiles que son la antítesis del discurso moralista anticorrupción de López Obrador. La cabeza de su partido estaría en manos muy cuestionadas, pero ya es hora de cumplir promesas y que el discurso de Palacio tenga matices de congruencia, y el presidente limpie lo que tenga que limpiar, empezando por su casa.