Encienden la Navidad en Mérida
MÉRIDA, Yuc., 25 de diciembre de 2020.- La inseguridad que se vive en diversos puntos de Mérida alcanzó ya a los fraccionamientos exclusivos del Norte de la ciudad. Vecinos de Altozano, ubicado en la carreta Mérida – Progreso, denunciaron ser víctimas de robo y de diversos incidentes que para algunos los hacen ya vivir con cautela e incluso temor.
Los afectados lamentan la falta de compromiso de la administración, pues aún y con los reportes que han hecho sobre autos con personas sospechosas que ingresan al lugar y los siguen, así como el robo de sus pertenencias, no han hecho nada por darle solución a esta problemática que podría ir en aumento.
Aldo Cerdán, uno de los vecinos de Altozano, manifestó que hace apenas una semana, un joven logró ingresar al fraccionamiento y sin que lo detectaran se metió a una vivienda por una de las ventanas del baño.
“Estaba la dueña con sus hijos pequeños, imagínense lo que sintió, el ladrón al ver que había gente por fortuna no hizo nada y salió corriendo; los guardias de seguridad privada poco pudieron hacer pues aseguran que no están capacitados”.
Pese a que notificaron a la administración y a elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), aún y con que mostraron el video donde se ve al presunto ladrón que sale huyendo, les respondieron que no podían hacer nada porque “el joven no se robó nada de la casa”.
Nicolás Carmona, Alejandro Cué y David Aguilar, también habitantes del lugar refirieron que además de ese incidente, en las privadas se han registrado diversos robos.
“En estás últimas semanas al menos a cuatro familias les han robado cosas, por pequeñas que parezcan, son tus cosas, como son patinetas, bicicletas y objetos que uno deja en la cochera de su casa creyendo en que Mérida y fraccionamientos como estos son seguros”.
Alejandro Cué explicó que hace un par de días, cuando salió con su esposa e hija a pasear en bicicleta, notó la presencia de un auto negro con música a todo volumen, al interior había dos personas que les parecieron sospechosas que se les quedaron viendo y que los siguieron hasta la entrada de su privada. Los guardias de seguridad no hicieron nada.
“A mi si me genera miedo, porque venimos a un lugar que nos vendieron como seguro, empezamos a ver estas cosas y la administración no hace nada porque según ellos no nos hicieron nada, además, los guardias se supone que están para cuidar y en realidad no están capacitados, son solo como porteros”.
El señor Jaime Ramírez Basulto aseguró que esto no solo se ha suscitado en el área que ellos viven, pues vecinos de otras privadas han sido víctimas de atracos y han visto personas que entran por los techos.
“Mi hija ya está grande, se puede defender o hacer una llamada para pedir ayuda, pero es preocupante que la administración no brindé un buen servicio de seguridad, hay niños jugando, se podrían robar a alguno porque los guardias no toman las previsiones adecuadas para ver quién puede o no entrar a estas áreas”.
Los afectados se dijeron preocupados y molestos, pues a pesar de todo esto, ellos siguen cumpliendo con los pagos que les piden los administradores y no ven una respuesta adecuada a sus solicitudes.
Coincidieron en que si bien, algunos pagan renta, para otros representa su patrimonio y sienten intranquilidad, pues los dueños del fraccionamiento están más ocupados por vender las casa que aún están vacías que por resolver los problemas que ya tienen.
“Si no nos responden vamos a colgar lonas en nuestras casas, donde se explique la inseguridad de esta zona, a ver si así nos hacen caso, porque algún posible comprador va a enterarse de lo que realmente pasa aquí”.
Los vecinos expresaron sentirse decepcionados con la situación que pasan ya que no descartan comenzar a tomar medidas de seguridad extras, como en otros estados del país, como colocar cámaras de video vigilancia, portones en sus cocheras, maya ciclónica y protecciones en sus ventanas y puertas, pero ese no es el fraccionamiento que les ofrecieron y mucho menos la forma de vida con la que se presume Mérida a nivel nacional.