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MÉRIDA, Yuc., 09 de septiembre de 2020 .- Además de convertirse en la próxima nueva casa de los Leones de Yucatán, uno de los beneficios del nuevo Estadio Sostenible presentado esta mañana será traer de nueva cuenta a las Ligas Mayores de Béisbol (MLB) a la entidad, apuntó el presidente ejecutivo del club, Erick Arellano Hernández.
Después de la presentación oficial del proyecto, realizada en el Centro Internacional de Congresos (CIC) el empresario deportivo dijo para Quadratín, sentirse satisfecho ante este nuevo proyecto que tiene miras para inaugurarse en el año 2023.
“Estamos muy contentos de por fin tener un escenario que hemos pedido desde hace seis o siete años, porque la afición de Yucatán merece estar cómoda”.
Consideró que tanto en el Estadio Carlos Iturralde de los Venados de Yucatán, como en el Parque Kukulcán Álamo, no tienen las mejores condiciones para los seguidores del deporte, por lo que este nuevo recinto estará a la altura de ambas aficiones.
En cuanto al rol de juegos entre el fútbol y el béisbol, Arellano Hernández destacó que una de las primeras reuniones previas a la inauguración, será con la Liga de Expansión de fútbol, para armar un buen calendario.
“Probablemente, el reto a vencer, es el tema de playoffs, porque de repente llueve o se pospone, pero en realidad los obstáculos son muy pequeños para los beneficios que vamos a tener”.
Con respecto a la ubicación del próximo recinto, manifestó desconocer los detalles, ya que es un tema que no les corresponde a Leones de Yucatán: “la verdad no tengo ni idea donde va a quedar, nosotros solo vamos a llegar a jugar y ganar”.
El Estadio Sostenible Yucatán es el proyecto de iniciativa privada presentado en Mérida, mismo en el que se podrá practicar tanto béisbol como fútbol, así como otras disciplinas deportivas, además de tener capacidad para albergar importantes conciertos y espectáculos culturales.
La inversión será de capital privado y en su primera etapa se prevé una derrama de 2 mil 200 millones de pesos, que generarán cerca de 4 mil empleos durante la construcción.
Cabe destacar que la última ocasión en la que la última vez que un equipo de la LMB jugó en suelo yucateco, fue para marzo de 1982, cuando los Marineros de Seattle se enfrentaron a los Leones de Yucatán, para protagonizar el último partido en el estadio Carta Clara.