Por la contingencia, cambió su negocio del mercado a su hogar

MÉRIDA, Yuc., 21 de abril de 2020.- Con una extensa variedad de frutas y verduras, Manuel Martínez y su familia han emprendido una pequeña frutería en su propio hogar para poder solventar sus gastos, esto luego de que por la emergencia sanitaria se haya quedado prácticamente sin ingresos.

Comenta que tiene un local en el mercado Lucas de Gálvez, sin embargo, la cuarentena, sumada a la invitación de autoridades estatales y municipales para que los negocios indispensables cerraran sus puertas, derivó en una considerable disminución de personas en dicho centro de abasto.

Al enterarse de que sus ventas bajaron hasta en un 70 por ciento, algunos amigos y vecinos le sugirieron vender su mercancía en su propio hogar y así poder sacar algo de dinero para pagar los gastos de su casa.

“Hace dos semanas emprendimos en mi casa, los vecinos ya no tenían la posibilidad de salir por la cuarentena, ellos sabían que nos dedicábamos a esto y me decían que vendiera aquí, la verdad todos ellos nos animaron, además tenemos vecinos de la tercera edad y como no salen, les ofrecemos servicio a domicilio, mi hijo va de casa en casa levantando pedidos o haciendo entregas” indicó.

Con algunas cajas de madera en las que pone las frutas y verduras en la acera, una lona para protegerlas del sol y una pequeña mesa dentro de su hogar, ubicado en la Calle 77 entre 72 y 74 del Centro, Manuel atiende a sus clientes, cuidando siempre las medidas de higiene.

Además, el tener la mercancía en la calle y a la vista de todos, permite que algunos conductores que pasan por el lugar se detengan para llevar algunos productos; sobre el servicio a domicilio explicó que entregan 3 cuadras alrededor de su domicilio.

“La verdad esto me está ayudando, porque hay que sacar para la comida de mi familia y los gastos de mis hijos, además mi mamá tiene insuficiencia renal y es diabética, no tenemos citas en el seguro ahorita y tampoco nos dieron la insulina, la tuve que comprar yo esta vez, son 700 pesos, por cosas como esas no me quedó más remedio que habilitar mi puesto”

Manuel y su familia, invitan a los vecinos del Centro a acudir a su negocio, garantizó que cuidan todas las medidas de sanidad, pues además del cubre bocas, también han colocado un trapo con cloro para desinfectar los zapatos de cada cliente que ingresa y piden a quienes llegan que guarden la sana distancia.

Añadió que no solo deben apoyar su iniciativa, también la de muchas otras personas que por la contingencia sanitaria se han visto obligadas a buscar los métodos para salir adelante.