Se mantendrán noches y mañanas frescas en la Península de Yucatán
MÉRIDA, Yuc., 1 de marzo de 2021.- Aunque ya han transcurrido cuatro meses desde la reapertura de la zona arqueológica de Chichén Itzá, más de 10 mil habitantes del municipio de Tinum, Yucatán, dedicados a la venta de artesanías en dicho lugar, siguen pasando por una situación crítica al no poder recuperar su estabilidad económica, misma que se podría agravar con el próximo cierre anunciado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
“Solo vendemos 100 pesos, 120, cuando mucho 200 pesos, no se está vendiendo como antes y no puedes ni recuperar tu inversión, pero tenemos que regalar nuestros productos porque si no lo haces, no tienes ni para comer”, manifestó Mariana Mex Yam, líder de los artesanos de Chichén Itzá.
En entrevista para Quadratín, Mex Yam indicó que aunque sí llega turismo a la zona arqueológica, la dinámica dentro del parador turístico “no está funcionando” y desfavorece a los vendedores locales, ya que las grandes empresas turísticas como Grupo Xcaret no permiten que sus clientes consuman sus productos artesanales.
“Son ellos los que nos han perjudicado, hemos intentado hablar con ellos para que nos permitan vender a los turistas, pero son personas que no quieren porque dicen que nosotros estorbamos”, señaló la artesana originaria de la comisaría de Pisté.
En ese sentido, llamó a las autoridades responsables de Chichén Itzá, como lo son el INAH y el Patronato Cultur de Yucatán, a que “sean conscientes” de que al menos 2 mil 400 artesanos y sus familias dependen del comercio en el lugar, mismos que actualmente son desfavorecidos a pesar de la difícil situación económica que dejó la pandemia del Covid 19.
Reveló que por esa situación, este año ningún artesano pudo invertir en material para las artesanías, ya que no cuentan con el capital suficiente para trabajar y mantener a sus familias: “lo que sobró de nuestro trabajo del año pasado es lo que hemos estado sacando hasta ahora”.
A esta “complicada situación” le suma que la semana pasada, el INAH anunció que cerrará las puertas de Chichén Itzá durante los días que enmarcan el equinoccio de primavera, fecha importante para los comerciantes del sitio arqueológico.
“La verdad son los únicos días especiales y que nosotros esperamos para que podamos vender, trabajamos casi todo el año nuestras artesanías para que en esas fechas las pudiéramos sacar (…) el INAH solo nos dijo que van a cerrar y ya, es todo”.
Mex Yam reveló que los artesanos de Tinum viven con el temor de que se repita la situación del año pasado, cuando las autoridades estatales y el Instituto acordaron el cierre temporal de Chichén Itzá, mismo que se prolongó por siete meses.
“Estuvimos sufriendo durante casi un año porque no volvieron a abrir, nosotros dependemos el 100 por ciento de las artesanías, así que ojalá no nos mientan nuevamente porque la cosa se pondría peor”, concluyó la líder de los artesanos.