Indicador Político
No hay manera de ocultar este sexenio de horror en materia de violencia y asesinatos. La realidad derrotó a López Obrador y cargará por siempre con cuatro de los cinco años con más homicidios dolosos –faltando uno– en la historia del país. Pero, sobre todo, por la derrota del Estado mexicano, que no cumplió con aquello para lo que fue creado: la seguridad de sus ciudadanos, dice Raymundo Riva Palacio, en su colaboración de ayer jueves en El Financiero.
Escuchando los anuncios de Claudia Sheinbaum uno se pregunta el por qué miente. Dice: la salud y la educación te las devolvimos como un derecho y no como un negocio o privilegio como era en el pasado. La realidad nos dice que Morena le negó a los mexicanos un servicio médico de calidad y hoy 50.4 millones de mexicanos carecen de atención y menos de medicinas.
Para quienes dudan de las cifras baste decir que el año pasado pasó de 20.1 millones sin acceso a la salud en 2018 a 50.4 millones de 2022. De 16.2 por ciento en 2018 a 39.1 por ciento al cierre de 2022. Hoy, 23 estados tendrían que ceder no sólo 110 mil millones de pesos que utilizan para esa labor sino también la infraestructura para el gobierno federal los administre. Los estados que ya aceptaron el despojo de la Federación son los gobernados por Morena.
En el tema de la pandemia fuimos el segundo país de America con más muertes y se tuvo la incidencia más alta con 2,398 decesos por cada millón de habitantes.
Para maquillar el fracaso, el gobierno federal utiliza el IMSS-Bienestar con un esquema de 1979 con presencia en sólo 19 entidades y sus capacidades están al límite y desde 2014 no se han construido nuevos hospitales. De 2 mil 660 millones de pesos ejercidos en 2009 a 2020 la reducción ha sido del 914 por ciento para 227.8 millones. El gobierno ha reducido gasto aún en tiempos de pandemia.
En 2023 una lectura superficial del tema de salud mostraría un aumento del gasto de 39 por ciento o 33 mil millones para alcanzar los 874 mmdp, el mayor de la historia, pero al desagregar el análisis del gasto la debacle en salud no deja de agravarse, especialmente para los que no son derechohabientes. El aumento real en salud apenas es del .08 por ciento.
Los datos duros del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) permiten aseverar que la transformación que prometió el presidente López Obrador en la campaña que lo llevó al triunfo fracasó: no hay seguridad en el país, el 85 por ciento del territorio nacional con presencia activa del crimen organizado, 173 mil muertos, militarizada la seguridad, pero escasos esfuerzos para contener la delincuencia y ataques constantes a los jueces y a la Suprema Corte de Justicia, aniquilando la posibilidad de justicia y usándola contra los adversarios políticos; en educación, somos el último lugar en diferentes mediciones y estamos en la cola de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico además de la anulación de escuelas de tiempo completo, desaparición de las guarderías infantiles y atención pésima a la niñez: con números al 2022, 25.1 millones de personas estaban en rezago educativo.
Los resultados son la única manera de evaluar un gobierno y el de la 4T no los tiene y aunque mienta sobre cómo se gobernó en el pasado, la realidad es que no hay metas que consolidar ni búsqueda de eficacia ni eficiencia sino el poder para poder avasallar a los adversarios y el gobierno para sostener su plataforma política e ideológica.
Para que haya democracia, la primera condición es que haya demócratas y López Obrador ha dejado claro que él dirá lo que la gente quiera escuchar pero hará lo que a él le convenga para mantener el poder.
Las malas noticias, no sólo vienen acompañadas de malas actitudes sino que el mensaje es que si hay alguien radical en Morena, el presidente decidirá por alguien peor que lo represente como sucedió ayer cuando anuncio que Lenia Batres Guadarrama será su propuesta para ingresar a la Suprema Corte de Justicia en lugar del ministerio Arturo Saldívar quien renunció a su cargo para irse a la campaña de Morena.
La colonización de la Corte no vaticina nada buena para el país precisamente porque no se atenderán las leyes sino que se usarán a la medida que el gobierno las necesite y no sólo para presionar opositores sino también para someterlos.
PD
En Campeche se consolida que para que haya democracia tiene que haber demócratas y el órgano electoral local está bajo acecho del gobierno de Layda Sansores. No es suficiente que Lirio Suárez Améndola haya ganado por méritos y con excelsitud los exámenes del INE sino que cómo no es obediente y no garantiza el triunfo de Morena están intentando, con más ahínco, sacarla del cargo para colocar en él a un presidente a modo. Hoy debe decidir el INE sobre esa solicitud de sacarla del órgano electoral y en otro espacio daremos cuenta de lo que sucede en la autoridad electoral local.