Impulsan estrategia camaleón para salvar vidas
MÉRIDA, Yuc, 18 de febrero de 2020.- Remi tiene cuatro años y padece de cáncer de rabdomiosarcoma, a pesar del desabasto de medicamentos para la quimioterapia, no ha dejado de recibir su tratamiento. Sin embargo, ha tenido que compartirlo y disminuir las dosis que recibe:
“Yo sé que no siempre hay este medicamento, no todos los niños tienen la suerte. Hay ocasiones en que una ampolleta de 400 ml se repartió a mi hija y otro niño, es un poco menos de la dosis, pero se les aplicó a ambos” comentó en entrevista la señora Flor Méndez Barrera.
Esta es una de las medidas que el personal que labora en el área de Oncología Pediátrica del Hospital Agustín O’Horán ha adoptado para evitar que los pequeños interrumpan su tratamiento.
También las donaciones de patronatos y personas han sido básicas para mantener la salud de los pequeños: “solo sé que llegaron por medio de donación porque pregunté una semana antes y me dijeron que no había desde hace mucho tiempo. Sé que las asociaciones están trabajando de manera activa”, aseguró Flor Méndez.
En el caso de Remi, su esquema médico está compuesto por cuatro medicamentos de los cuáles dos no ha sido surtidos por el Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI): “mi hija toma un medicamento, el Bevacizumab que cuesta entre 33 mil a 44 mil pesos y el Temozolomidaque no están llegando” dijo Flor.
Cabe recordar que el pasado 5 de febrero mediante un comunicado de prensa el Gobierno del Estado de Yucatán informó que arribaron a Yucatán los medicamentos para pacientes con cáncer, se abasteció de: Vincristina, Ifosfamida, Ciclofosfamida, Doxorrubicina, Vinblastina y Bleomicina.
De manera extraoficial trascendió que se trata de dosis para dos semanas. En el caso del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) las madres de familia también manifestaron que no han recibido todos los medicamentos necesarios para las quimioterapias de los infantes.