Abre convocatoria al premio de Pesca y Acuacultura Ejemplar
MÉRIDA, Yuc., 12 de agosto de 2020.- Estados Unidos, la Unión Europea, Canadá y Suiza, hogar de algunas de las mayores empresas de alimentos del mundo, presionaron a México para que retrase las próximas advertencias sanitarias sobre alimentos y bebidas procesados, según un documento publicado por la Organización Mundial del Comercio (OMC).
México, el mayor consumidor de alimentos procesados en América Latina y el cuarto más grande del mundo, ha batallado durante años con altas tasas de diabetes y obesidad, una crisis de salud que se ha visto agravada por el Coronavirus.
La nueva norma mexicana está programada para entrar en vigor en octubre y requerirá un etiquetado nutricional en la parte frontal del paquete de los alimentos, que describa claramente los riesgos para la salud que se presentan cuando esos productos contienen un alto contenido de azúcares, calorías, sal y grasas saturadas.
La semana pasada, el estado de Oaxaca prohibió la venta a menores de edad, de alimentos conocidos como comida chatarra y bebidas azucaradas, convirtiéndose en la primera entidad del país en legislar sobre el tema.
Según algunas actas de la OMC, del 13 y 14 de mayo, la delegación de Estados Unidos dijo que apoyaba el objetivo de salud pública de México, pero que estaba preocupada por la fecha de implementación y solicitó un período de transición de dos años.
La delegación suiza dijo que los cambios en los requisitos de etiquetado sumarán dificultades “en un momento en que los productores, importadores y minoristas están tratando de asegurar el suministro ininterrumpido de alimentos y bebidas al mercado mexicano”, de acuerdo con el documento.
La Unión Europea también solicitó un período de transición de dos años y Canadá pidió un retraso de al menos 12 meses.