Disminuye número de casos de dengue en Yucatán
MÉRIDA, Yuc., 25 de Diciembre de 2020 .- No todo el mundo pasa las Navidades en torno a una mesa con comida para compartir, ni tiene la suerte de salir a comprar para su gente. Las enfermedades no entienden de fechas ni de celebraciones, para Mere Lobato pasar esta celebración internado en un hospital con área Covid 19, es una experiencia que jamás hubiera imaginado.
El paciente de 52 años de edad, señaló que tras sentir un malestar en su riñón desde el pasado enero de este año, su doctor de cabecera le envió un pase para llevar a cabo una operación, sin embargo, por saturación hospitalaria por pacientes Covid, le fue pospuesta dicha cirugía hasta este 24 de diciembre.
“Esto lo resume todo; mi día de Navidad, es permanecer en una cama para mi recuperación. Decidí operarme y sacrificar mi cena en familia, no había más fechas y tuve que internarme”, apuntó mediante un mensaje de texto enviado a Quadratín.
Mere, que se dedica a conducir camiones de transporte público, explicó que durante toda la pandemia del coronavirus esperaba una fecha para ingresar al Instituto Mexicano de Seguro Social (IMSS), pero “desafortunadamente no había espacios” para atender otros padecimientos.
A pesar de que sus síntomas “eran leves”, aceptó la fecha justo en vísperas de la Navidad, porque no podía dejar pasar la oportunidad que estaba esperando desde hace más de nueve meses.
Luego de ser intervenido quirúrgicamente, sintió la nostalgia de no poder compartir ese momento especial en el que celebran la llegada del niño Jesús.
“Me dieron recalentado: pierna envinada, ensalada rusa, frijoles ayocotes riquísimos y de postre, manzanas con nuez y un vasito de sidra. Amo el IMSS”, platicó bromeando.
Mere Lobato, dijo brevemente, que iba a ponerse en cuarentena en su casa, una vez que lo den de alta, para no representar un riesgo para familiares y amigos, ya que estas últimas 24 horas ha estado interactuando con personas que salen y entran de otras áreas del nosocomio, incluso los del área Covid.