Prevén descenso de temperaturas en la Península de Yucatán
MÉRIDA, Yuc., 22 de mayo de 2024.- Apicultores de la península de Yucatán, exigen a las autoridades que atiendan la muerte masiva de abejas, señalan que esto se debe a las intensas sequías, e incendios que han habido, pero también a las agroindustria y granjas porcícolas que se han establecido en la zona.
En una rueda de prensa ofrecida por la Alianza Maya por las Abejas Kaabnaloón, en la cual participan apicultores de distintos municipios del estado, urgieron acciones para combatir el problema que hay con las abejas, específicamente todo lo relacionado al uso de plaguicidas.
Lady Arecely Pech Martín, conocida como la Guardiana de las abejas, exhortó a las autoridades a que suspendan el uso de plaguicidas en la zona de Hopelchén, así como detener los megaproyectos y crear estrategias que protejan a la apicultura.
“El Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático ha detectado que ocho de 60 plaguicidas que se usan en la zona de Hopelchén no deberían usarse por su alto grado de toxicidad, esta situación es grave porque hay una muerte masiva de abejas y el uso de plaguicidas es uno de los principales motivos”.
Agregó que a esto hay que sumarle los fuertes incendios que ha habido en el estado, así como las olas de calor que no cesan y que ha provocado sequías intensas y fuera de lo normal.
Fermín Xulub Cohuó, apicultor en Tizimín, contó que ya perdió 85 colonias de apiarios y en cada colonia cada reina pone dos mil 500 huevos al día,
“No soy el único, después de que encontré mis abejas muertas me encontré con otros apicultores que también tenían muertes en sus apiarios y fue por intoxicación de agroquímicos, no podemos continuar así”, indicó.
Las personas apicultoras manifestaron que se sienten amenazados por todos los megaproyectos que están llegando a sus zonas y están arrasando con la flora y fauna sin que nadie pueda hacer nada, pues todo es con permisos gubernamentales.
Indicaron que tan solo en el caso de Hopelchén se calcula una pérdida cercana hasta de 4 millones de pesos, de los cuales no les ha sido devuelto nada a las y los productores.