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MÉRIDA, Yuc., 14 de julio de 2023.- El superpeso mexicano ha impactado de manera positiva a las y los más de 350 productores de guayaberas de Tekit debido a que han podido adquirir máquinas bordadoras y telas a menor costo, así lo dio a conocer Antonio Lara Briceño, productor y coordinador de la Feria de la Guayabera.
Explicó que actualmente una máquina bordadora de seis cabezas se compra en unos 50 mil pesos, cuando anteriormente se adquiría en 90 mil pesos, aunado a que varias tiendas están vendiendo las telas a menor precio, lo que ha beneficiado de forma positiva a la industria textil del municipio, cuya economía depende de la fabricación de prendas.
Aunque el superpeso mexicano ha impactado positivamente en compra de maquinaria e insumos, dijo que en donde sí se ha visto impacto negativo es en la venta de prendas en el extranjero, ya que se gana menos por el tipo de cambio, algo que no afecta las ganancias totales porque la importación de las prendas representa solo el cinco por ciento.
“No impacta de manera negativa, ya que el 95 por ciento de la producción se vende en el país, principalmente en la zona del sureste, aunque en la Ciudad de México, Monterrey y Baja California hay una fuerte comercialización de las guayaberas”, dijo el productor, quien abundó que lo que les preocupa no es el tipo de cambio, sino la escasez de obreros.
Explicó que a raíz de la pandemia del Covid 19, personas de entre 18 y 29 años que laboraban dentro de los procesos de producción, principalmente en el área de costura, migraron a Estados Unidos y al no estar en la cadena de producción, la capacidad de los talleres para producir en cantidad y tiempo se ha visto mermada.
Lara Briceño señaló los atrasos varían entre los productores y depende de varios factores como el tipo de bordado que se trabaje, pero en su caso, el atraso puede ir desde un mes a un mes y medio, aunado a que la falta de mano de obra ha impactado los salarios de las y los trabajadores, quienes están cobrando más por el trabajo que realizan.
“Las personas cobran más por su trabajo y es más fácil que se vayan, es decir, si ven que les están pagando mejor en otro taller, dejan el trabajo (que tenían)”, refirió el productor, quien abundó que en promedio un costurero cobra entre mil 500 y mil 800 semanales, mientras que el supervisor de bordados, gana entre nueve y 10 mil pesos mensuales.