Desde hace 7 años no se sentía tanta heladez: Ciafeme
MÉRIDA, Yuc., 10 de octubre de 2022.- De las 90 mil hectáreas de manglar que hay en Yucatán, un promedio de 30 a 40 mil está degradadas, lo cual ocasiona consecuencias graves como el que haya más inundaciones en la temporada de lluvias, señaló Jorge Herrera Silveira, investigador del El Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del IPN en Mérida, (Cinvestav).
“Para mí es grave, no solo por la degradación actual, sino porque se sigue degradando, porque siguen los cambios de uso de suelo, se sigue rellenando; esto es un tema grave si no se hubieran perdido esas hectáreas seríamos segundo lugar en extensión y ahora es el tercero en la Península” expresó el investigador, en el marco del inicio del segundo Congreso de Manglares de América que se realiza en Mérida, hasta el 14 de octubre.
Destacó que la pérdida de manglares se ve reflejado en el impacto que tienen los fenómenos naturales en el Estado, específicamente los huracanes…
“No hay que temerles a los fenómenos, pero cuando hay degradación de manglares sí, porque entonces el impacto es mayor, entonces hay que hacer acciones para conservarlos en buena salud para que cuando haya huracanes y tormentas, hay que conservar lo que hay para responder de manera eficiente cuando estas situaciones se presenten”
De los factores que inciden en esta problemática de degradación de los manglares, destacó que los Puertos de Abrigo se hayan conectado con el humedal; en Telchac la boca que se abrió, la dársena de Yucalpetén, la boca de Chuburná de Carbonera.
“Estas cuatro dársenas y bocas han hecho hacen que se degrade el manglar, porque ha entrado agua salada que se ha evaporado y ha salinizado el manglar, además, hay menos aporte de agua dulce, porque en los petenes se han rellenado con materia orgánica y las carreteras que han cortado los flujos y los pasos de agua son insuficientes”,
Señaló que estas acciones siguen obstruyendo los pasos de agua que permiten el intercambio con el mar y las consecuencias las está viviendo la gente, para ejemplo las lluvias de Cristóbal, en donde se inundaron muchas áreas como resultado de haber desparecido los manglares que son como esponja y absorben el agua de las lluvias.
“Ahora estamos llevando a cabo acciones de recuperación del manglar en Celestún, Sisal, Chuburná, en Progreso, Yucalpetén, Dzilam y El Cuyo, pero hablamos de un máximo de 100 hectáreas en cada sito, mil hectáreas en total, contra las 30 mil o 40 mil que están degradadas, es muy poco y en gran parte es porque no hay recursos” agregó.
Para finalizar, hizo un llamado a las autoridades, de los municipios, principalmente, para que no se otorguen más permisos de cambio de uso de suelo, que se limpien los pasos de agua y reducir la entrada de agua marina de estas bocas.