Reconoce la Unesco a bordadoras mayas
MÉRIDA, Yuc., 28 de agosto de 2024.- En su último evento como gobernador constitucional, Mauricio Vila Dosal entregó la primera etapa del astillero de mantenimiento y reparación de embarcaciones y artefactos navales de Dipensa, empresa yucateca que invirtió más de 230 millones de pesos para la construcción del lugar.
“Es un día importante para la industria en Yucatán porque pocas veces uno puede presenciar la llegada de una nueva industria y hoy estamos dando el primer gran paso para que la industria naval llegue a Yucatán y tenga unas instalaciones de primera que no se tiene en muchos lugares del país”, mencionó el mandatario.
Comentó que el astillero que se construye es similar al que está en Mazatlán, Sinaloa, que es especializado en navíos atuneros y al del puerto de Veracruz, el cual tiene la capacidad de dar servicio a uno o dos barcos, dependiendo del tamaño de los buques, pero el de Yucatán tendrá capacidad para atender a seis embarcaciones.
“El de acá va a tener la capacidad para atender a seis barcos al mismo tiempo, barcos de hasta 120 metros y cuatro mil 500 toneladas. Entonces, eso habla de la gran oportunidad de atender las embarcaciones que se encuentran no solo en el golfo de México, sino también de la costa este de Estados Unidos y del mar Caribe”, añadió.
Abundó que en este espacio trabajarán soldadores, pintores, eléctricos, ingenieros y técnicos que estarán siendo capacitados en el Instituto Tecnológico Superior de Progreso, lo que les dará la oportunidad de ganar mensualmente hasta 40 mil pesos, ya que esta industria genera una buena derrama económica.
Vila Dosal puntualizó que si bien el proyecto no ha sido terminado, ya está dando resultados, debido a que en este proceso de construcción ya ha generado más de 400 empleos directos y 120 indirectos, pero para su operación generará alrededor de 280 empleos directos, lo que mejorará la calidad de vida de los trabajadores.
Por su parte, Augusto Iturralde Patrón, representante legal de Dipensa Diques Peninsulares, detalló que la primera etapa consta de un muelle de 150 metros lineales, un taller de mil 100 metros cuadrados, oficinas y espacios que permitirán llevar a cabo reparaciones a flotas de manera eficiente y oportuna.
Asimismo, en el puerto de altura de Progreso adelantó que la empresa que representa invertirá 177 millones de pesos en una segunda etapa, lo que les permitirá expandir sus capacidades, agregar más instalaciones para reparaciones en dique seco, lo que incrementará significativamente sus operaciones y servicios especializados.
“El astillero (ya en una segunda etapa) contará con seis posiciones para dar servicio a barcos de hasta 120 metros de largo y cuatro mil 500 toneladas, una rampa, un carro de elevación, fosa de transparencia, oficinas, talleres, así como un muelle de 310 metros lineales”, indicó ante autoridades estatales y federales.