Califica Gobernador a Yucatán como un imán para las inversiones
MÉRIDA, Yuc., 20 de septiembre de 2020 .- Según datos de 2017 de Conapred y Cepal, México tiene una de las brechas salariales más amplias entre mujeres y hombres con más del 34 por ciento, cifra que supera el promedio mundial que es del 23 por ciento, lo que “en el país no solo hay un problema económico, sino de discriminación estructural”.
En todas las regiones del mundo, a las mujeres se les paga menos que a los hombres. La igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres y las niñas siguen estancados debido a la persistencia de desigualdades históricas y estructurales.
El Día Internacional de la Igualdad Salarial, que se celebró por primera vez este 18 de septiembre, representa los esfuerzos constantes por conseguir la igualdad salarial por un trabajo de igual valor. Esta lucha se basa en el compromiso de las Naciones Unidas con los Derechos Humanos y contra todas las formas de discriminación, incluida la discriminación contra las mujeres y las niñas.
En México, la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) y el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) reportaron que durante enero de 2020 el salario diario asociado a trabajadores hombres asegurados fue mayor que el de las mujeres a nivel nacional, 416.4 pesos y 363.5 pesos por día, respectivamente, lo que representa una diferencia de 14.6 por ciento.
Las entidades que presentan la mayor brecha salarial de género son Yucatán, Aguascalientes y Jalisco, de acuerdo con una publicación del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres).
Además, las mujeres que se insertan en el mercado laboral lo hacen en condiciones desfavorables: son ellas quienes asumen la carga de trabajo doméstico y de cuidado no remunerado, por lo que buscan empleos más flexibles, y es más frecuente que ellas interrumpan su carrera profesional para atender estas actividades lo que les impide alcanzar mejores sueldos.
En ese sentido, el Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, señaló este viernes en la jornada internacional para abogar por la igualdad de pago, que a esta situación se suma la pandemia de Covid 19, cuyo impacto económico ensanchará aún más la brecha salarial entre géneros.
A pesar de décadas de activismo y de numerosas leyes que garantizan la igualdad salarial, las mujeres siguen ganando menos de 80 centavos por cada dólar que ganan los hombres y en el caso de las mujeres con hijos, las mujeres de color, las refugiadas y migrantes y las mujeres con discapacidad, esa cifra es aún más baja, según muestran los datos de la ONU.
Para el Secretario General, la instauración del Día Internacional de la Igualdad Salarial constituye un paso importante porque la jornada hace patente la brecha salarial entre los géneros. Guterres invitó a la gente a preguntarse por qué las mujeres son relegadas a trabajos peor remunerados, ¿por qué tantas mujeres trabajan a tiempo parcial? ¿Por qué las mujeres se encuentran con un tope infranqueable en las profesiones con mayores ingresos?.
Para la ONU Mujeres, independientemente de la edad, los ingresos o el tipo de empleo, ir a trabajar implica para todas las mujeres un riesgo de sufrir violencia y acoso. Algunos jefes conceden ascensos únicamente a cambio de favores sexuales.
Los daños ocasionados en la salud física y mental pueden traducirse en absentismo laboral, salarios más bajos y despidos. Es probable que las mujeres se sientan injustamente oprimidas a la hora de elegir un trabajo y circular libremente.
Para evitar lo anterior, es necesario promulgar leyes y políticas que penalicen todas las formas de acoso y violencia de género en el lugar de trabajo. Trabajar de consuno con los sindicatos, las empresas y las personas que defienden a las y los trabajadores informales para que todas las mujeres conozcan sus derechos y puedan exigir reparación por las violaciones de sus derechos.